30 de abril de 2020
La incontinencia es un padecimiento que inhibe la capacidad de retener la orina en el cuerpo y la expulsa de manera involuntaria. Si bien esto puede darse en mayor o en menor medida, puede afectar a personas de todas las edades y sexos. La incontinencia urinaria mixta combina síntomas de la incontinencia de esfuerzo, como lo son el tener escapes de orina al toser o estornudar y la incontinencia de urgencia que es la necesidad repentina de orinar.
Hace referencia a la sensación o necesidad urgente de orinar que se presenta acompañada de goteos o descargas grandes de orina.
Al realizar una presión o esfuerzo en la zona pélvica se genera una descarga de orina. Este tipo de incontinencia se da al realizar ciertos ejercicios, toser, estornudar o reír.
En ocasiones el debilitamiento del suelo pélvico, unido a otras causas, provocan que los dos tipos de incontinencia que existen se combinen. Es lo que se denomina incontinencia mixta: de esfuerzo y de urgencia a la vez. En este caso, la mujer puede sentir un brusco y repentino deseo de orinar que es incapaz de controlar antes de llegar al baño y que provoca un escape, pero, también, que al hacer un esfuerzo mínimo, como toser o reírse, sufra pequeñas pérdidas de orina.
En la mayoría de los casos, la urgencia se debe a una vejiga hiperactiva, que se contrae involuntariamente y puede provocar en cualquier momento (con un cambio de postura o al escuchar ruido de agua…) el vaciado de la vejiga. Por eso, las ganas de orinar son repentinas e incontrolables y a menudo no nos permiten llegar al baño a tiempo. Las causas que provocan este “vaciado” involuntario son muy distintas: ciertos medicamentos, el tabaco, la cafeína o una cirugía vaginal.
Las pérdidas de esfuerzo suponen que nuestro suelo pélvico no es capaz de contrarrestar la presión abdominal que se genera cuando hacemos algunas actividades físicas o cuando tosemos o estornudamos. En la mayoría de los casos, la uretra no está bien sujeta y la vagina está laxa y débil. Cualquier esfuerzo hace que la uretra se bascule hacia abajo y se abra. La pérdida de estrógenos en el embarazo y los partos, la menopausia, y las cirugías vaginales son los posibles causantes de este problema.
Al combinar síntomas de la incontinencia de esfuerzo y la incontinencia de urgencia, identificarla puede ser un poco más difícil. Si experimentas pérdidas involuntarias de orina al toser, estornudar o realizar actividades físicas, y además sientes una necesidad repentina y urgente de orinar que a veces no puedes controlar, es una de las principales señales de que estás presentando incontinencia mixta.
Si te encuentras en esta situación, es muy importante que un profesional evalúe tu suelo pélvico y te indique qué tipo de tratamiento se ajusta más a ti. En el caso de la incontinencia mixta de orina normalmente se combinan los tratamientos que funcionan en la incontinencia de urgencia y en la de esfuerzo. Realizar ejercicios para reeducar el suelo pélvico será siempre una de las primeras opciones del especialista para volver a tonificar la musculatura pélvica.
También, ayuda mucho hacer cambios en el estilo de vida: en la dieta, la ingesta de líquidos y comer alimentos ricos en fibra para evitar el estreñimiento.
En cualquier caso, te recomendamos que si tienes pérdidas de orina, confíes en un producto adecuado mientras solucionas tu problema.