Todos olvidamos en dónde dejamos las llaves de la casa, para que fuimos al refrigerador o que le íbamos a decir a esa persona pero, ¿en qué punto olvidar tan frecuentemente se puede convertir en una situación de alerta? ¡Sigue leyendo para saber más!
¿Sabías que nuestro cerebro funciona de forma similar a una computadora? Sí, el ser humano necesita “olvidar” para dar lugar espacio a nuevos recuerdos. Es decir, nuestro procesos cognitivos deben reiniciarse, limpiarse y hasta borrar determinadas informaciones para dejar espacio a otras nuevas. Podemos olvidar lo que decimos y hacemos por motivos como un lapsus lingüístico o problemas de la memoria.
Cuando vamos creciendo y entrando a una edad más madura, los problemas de la memoria pueden volverse un poco más frecuentes y en algunos casos preocupantes. Ten presente que el deterioro cognitivo es parte del propio envejecimiento, pero algunas veces se detonan indicadores de que puede ser algo más.
Cambios en la memoria con la edad
Según los expertos, con la edad se producen tres cambios en la memoria que se consideran normales y forman parte del proceso natural de envejecimiento.
- La gente empieza a necesitar que a veces le repitan algo varias veces para poder almacenarlo en la memoria.
- Cuando intentamos recuperar un recuerdo, a medida que envejecemos, tardamos un poco más en conseguirlo: nos lleva más tiempo "encontrar" esa información.
- A veces necesitamos una pista para poder recuperar la información.
Estos cambios pueden comenzar a notarse desde los 40 o los 50 años, y en mayor notoriedad a los 60, 70 y 80, donde casi todos los adultos saludables tendrán alguno de estos problemas más agravados.
¿Por qué olvido lo que digo?
Algunos de las causas de la pérdida de la memoria transitoria más comunes son:
- Fallos temporales en la recuperación de palabras, esto se conoce como lapsus lingüísticos.
- Falta de atención o distracciones, haciendo que pierdas el hilo de lo que ibas a decir o hacer.
- Algunos medicamentos pueden potenciar la pérdida de memoria a corto plazo.
- El exceso de alcohol ayuda a que la pérdida sea más frecuente.
- Fumar reduce la cantidad de oxígeno que llega al cerebro y, como consecuencia, perjudica el funcionamiento de la memoria.
- Tanto la cantidad del sueño como su calidad afectan la memoria, duerme lo recomendable, te ayudará.
- Si la causa del estrés es un trauma emocional, puede dar lugar a la pérdida de la memoria.
- Una buena nutrición es importante para el correcto funcionamiento del cerebro, la ausencia de las vitaminas B1 y B12 puede afectar la memoria.
En varias ocasiones la pérdida de la memoria se produce como consecuencia de problemas más serios, como el deterioro cognitivo, la amnesia disociativa o el Alzheimer, visita a un médico si notas alguna de estas señales de alarma:
- La persona tiende a repetir la misma información o a contar las mismas historias una y otra vez sin darse cuenta de que están repitiendo esa información.
- Cuando se pierde la capacidad de hacer algo que antes sí podía hacer, como por ejemplo ir al baño, manejar, comer, entre otros.
- Olvido en repetidas ocasiones de nombres, lugares, o palabras comunes.
- Cambios en la claridad mental y el nivel de conciencia.
- Dificultad para relacionarse y desenvolverse en situaciones sociales o laborales .
¿Qué puedo hacer si tengo olvidos frecuentes?
- Escribe qué tan frecuentes son los olvidos que estás presentando y si los asocias con estrés, cansancio o falta de concentración.
- Visita un neurolingüístico, él evaluará tu nivel de pérdida de memoria y te recomendará diferentes actividades para fortalecer tus habilidades cognitivas.
- Lleva una agenda y planifica tus días. Esto te ayudará a reducir los olvidos.
- ¡Activa tu mente! Incluye en tu día a día actividades como leer, resolver rompecabezas u otros juegos y actividades cognitivas.
- Ubica elementos importantes como las llaves, la cartera y los anteojos, siempre en un mismo lugar.
¿Cómo mejorar la memoria?
Acá te dejamos algunas formas de mejorar la memoria:
- Duerme bien y lo suficiente, así le das la oportunidad al cerebro de que procese la memoria desde el "almacén temporal" de la memoria a corto plazo al "almacén permanente" de recuerdos a largo plazo.
- Ten una dieta saludable, que incluya pescado, aceite de oliva, aguacates, frutas y vegetales, nueces, legumbres y cereales enteros.
- Haz ejercicio, no sabes lo beneficioso que es para el cerebro y cuerpo moverse. Prestar más atención, evita distracciones cuando te hablen o pidan favores.
Recuerda que si tienes algún síntoma como los mencionados anteriormente puedes hablarlo con tu familia o pareja para que te presten más atención, ya que muchas veces nuestra mente nos juega una mala pasada.
¿Cómo ejercitar el cerebro para cuidar la memoria? Prevenir la pérdida de la memoria
¡Ejercitar el cerebro es una excelente manera de cuidar la memoria y mantener la agudeza mental! Aquí te contamos algunas estrategias:
- Realiza actividades que desafíen tu mente, como crucigramas, rompecabezas, sudoku y juegos de memoria.
- Aprende cosas nuevas constantemente, ya sea a través de cursos, talleres o investigando sobre temas de tu interés.
- Practica recordar información importante, como nombres, fechas, listas de compras o números de teléfono.
- Utiliza técnicas de memorización, como la asociación de imágenes, la elaboración de historias o la repetición espaciada.
- Participa en juegos de mesa que estimulen el pensamiento estratégico y la toma de decisiones.
- Lee regularmente libros, revistas o artículos que desafíen tu comprensión y amplíen tu conocimiento.
- Prueba actividades creativas, como dibujar, pintar, escribir poesía o componer música, para estimular diferentes áreas del cerebro.
- Ejercita tu habilidad para resolver problemas lógicos y matemáticos, ya sea a través de problemas de lógica, acertijos numéricos o juegos de ajedrez.
- Practica la concentración y la atención plena a través de ejercicios de meditación y mindfulness.
- Utiliza aplicaciones y juegos diseñados específicamente para ejercitar el cerebro y mejorar la memoria, disponibles en dispositivos móviles y en línea.
Recuerda que en TENA® tenemos productos ideales en caso de que olvides que ibas al baño o tengas pérdidas de orina frecuentes y por supuesto visita a tu médico para que te dé un diagnóstico y tratamiento personalizado.
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